sábado, 20 de junio de 2009

Testimonio de un taxista


Antonio Vargas Cuentas de 47 años, tiene que salir todos los días de su casa a las 11 de la noche para hacer “taxis”. Trabaja 10 horas para poder mantener a su familia. Tiene 4 hijos y su deber es darles una vivienda, darles de comer y educarlos. A veces Antonio no tiene mucho dinero para llevar comida a su casa, es por eso que tiene que trabajar toda la noche, ya que las tarifas a esas horas suben. “No hay trabajo señorita, esto es lo único que puedo hacer para que mi familia tenga una casa y puedan alimentarse”, dijo Antonio.
Muchas veces el en vez de ganar, pierde. Esto es porque el tráfico en lima es tan grande, que a veces pierde tiempo estando mucho rato en una misma avenida que es imposible de avanzar.
Cuando una pasajera le pregunta cuanto le cobra desde el ovalo higuereta hasta san Borja, el le dice: “7 soles”. La chica indignada le contesta muy mal y simplemente se va en busca de otro taxi. “A veces la gente cree que porque el sitio es cerca tengo que cobrar poco, pero lo que ellos no saben es que me demoro mucho a causa de el tráfico que hay en las calles y pierdo dinero en la gasolina. Muchas veces cobro lo normal y luego me arrepiento, porque en realidad pierdo tiempo y dinero, ya que estoy como 30 minutos en una misma avenida, ni siquiera estoy cerca del lugar y para colmo solo cobre 8 soles. Me sale caro pues señorita, la gente no comprende”.
Un sol más o un sol menos a la gente que puede tomar taxis no le afecta, pero a Antonio si, ya que tiene que mantener una familia grande.
Lo que me parece injusto de todo esto, es que hay un montón de taxistas que salen a trabajar y que no tienen sus papeles al día o para colmo, no tienen brevete. Taxistas que no solo van a trabajar, si no que salen a hacer daño a las personas, como por ejemplo asaltarlas, violarlas o hasta matarlas. Esos taxistas deberían de ir hasta presos porque son tantos, que quitan el trabajo a los taxistas que en verdad salen a trabajar porque necesitan ese dinero.
Antonio dice que la gente esta tan asustada de los taxistas, que a veces cuando una pasajera le pregunta cuanto le cobra por llevarla a su destino, lo mira como si lo estuviera examinando, como si tuviera cara de delincuente y que no le va a hacer daño. “Justos pagan por pecadores”, dijo Antonio. Él esta muy indignado con la ley, ya que no hacen nada por arrestar a los taxistas que en verdad salen a la calle solo para asaltar a la gente, etc. “Los detienen 2 días y luego los sueltan” expresó Antonio.
Los policías de tránsito deberían de poner las cosas en orden, ya que uno de los problemas más grandes que hay en lima es el tráfico. Si hay muchos taxistas informales, mucho más tráfico habrá.

1 comentario:

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